El proceso de emprender es, sin duda, un camino complejo donde se necesita voluntad, capacidad y suerte y, a pesar de todo, la buena combinación de estos elementos no garantiza el éxito de toda “aventura empresarial”.



 

Un grupo de ranas viajaban por el bosque, cuando de repente dos de ella cayeron en un pozo profundo. Las demás se reunieron alrededor del agujero y, cuando vieron lo hondo que era, le dijeron a las caídas que, para efectos prácticos, debían darse por muertas. Sin embargo, ellas seguían tratando de salir del hoyo con todas sus fuerzas. Las otras les decían que esos esfuerzos eran inútiles.

 

Finalmente, una de las ranas atendía a lo que las demás decían, se dio por vencida y murió.La otra continuó saltando con tanto esfuerzo como le era posible.La multitud de ranas le gritaban que era inútil, pero la rana seguía saltando, cada vez con más fuerza, hasta que finalmente salió del hoyo.Las otras ranas le preguntaron: - ¿No escuchabas lo que te decíamos?-La ranita les explico que era sorda, y creía que las demás la estaban animando desde el borde a esforzarse más y más para salir del hueco.

 

 

*Autor desconocido.

 

 

Para ser emprendedora y crear nuestra empresa hay que ser sorda como la ranita de la fabula.

 

 

Hay muchas “ranitas” en las orillas intentando desanimarnos constantemente:

 

      - Nuestros padres: ¡Estás loca ¡Estamos en crisis económica!...

 

      - Nuestra pareja: Se necesita mucho dinero para emprender…

 

      - Nuestros familiares: Esa idea no es innovadora…

 

      - Nuestras amigas: Mejor quédate quieta y no busques problemas...

 

      - Nuestra vecina: Mi sobrina tenía una empresa igual y fracasó…

 

      - El marido de mi mejor amiga: Mejor prepara unas oposiciones…

 

      - Otras persona: No es tiempo de crear empresas…

 

 

Te animo a que seas como la ranita valiente, saltes fuerte y logres tus metas de emprendimiento, tienes la mejor base para ello: poder trabajar en lo que te gusta, en tu pasión.

 

Todos tenemos el potencial, solo falta arrancar, muchas veces el mayor obstáculo es uno mismo.

 

El proceso de emprender es, sin duda, un camino complejo donde se necesita voluntad, capacidad y suerte y, a pesar de todo, la buena combinación de estos elementos no garantiza el éxito de toda “aventura empresarial”. La dificultad radica, principalmente, en encontrar una idea atractiva y no dejarse desalentar por todos los obstáculos que hay que sortear a lo largo del proceso.

 

 

¡Actúa!

 

¡Hoy es el día para empezar a convertir tu sueño en realidad!

 

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